La captación de viviendas de particulares que no las están utilizando porque necesitan una reforma es una de las iniciativas que el Govern va a poner en marcha. Según ha podido saber mallorcadiario.com, a estos propietarios se les pagará una inversión de entre 10.000 y 12.000 euros para adecuar la vivienda y a cambio les pedirán que se las cedan para alquiler social durante 3 años.
Se trata, sin duda, de una novedosa propuesta que el Ejecutivo de Francina Armengol ha proyectado con el propósito de mejorar el sector del alquiler y dar salida a los propietarios que disponen de viviendas que no ocupan.
Esta fórmula está contemplada en el Plan de Alquiler Social, que a su vez incluye distintas líneas de actuación.
La realidad es que tal y como está la situación económica, los ciudadanos, salvo los extranjeros, no compran y optan por el alquiler. La coyuntura actual para hacer vivienda pública para vender no es la más adecuada, aseguran desde el Govern balear a mallorcadiario.com, así que no queda otra opción que la colaboración público-privada. "Presupuestariamente es difícil llevar a cabo vivienda pública", añaden las mismas fuentes.
Así pues la idea, dentro del llamado calendario social, es conseguir llevar a cabo nuevas promociones pero con fórmulas diferentes. Y en este sentido es interesante la línea que se está ultimando en la futura Llei de l'Habitatge para detectar casas vacías en manos de los bancos y las grandes inmobiliarias.
Y de cara a los sectores de la promoción inmobiliaria y de la construcción, se va a reactivar que los ayuntamientos cedan suelo y a cambio, cuando la inversión privada construya las viviendas, que una parte de las mismas sea para alquiler social. La otra, evidentemente, sería para el mercado libre.