El Govern convocará este lunes a la Mesa de Pobreza Energética a la que ha citado a las compañías distribuidoras y comercializadoras eléctricas para pedirles que se comprometan a no cortar el suministro de electricidad a ninguna vivienda siempre que la razón sea por impago, y si la causa del impago sea por una situación por la que el titular no puede hacer frente al pago. La intención del Govern es que esta moratoria se alargue hasta el mes de marzo.
La idea del Govern es que sea esta misma Mesa de la pobreza Energética en la que estarán integradas las compañías eléctricas, quien decida quiénes pueden aferrarse a esta moratoria, y de que manera se afrontará este impago, ya sea con aplazamientos de la deuda, la asunción de la misma por una tercera persona, o la condonación si se trata de una causa mayor.
Con esta medida el Ejecutivo quiere garantizar unas condiciones dignas de vida para todos los ciudadanos de las islas, y el derecho a poder calentar el hogar o poder cocinar alimentos cocinados.
Esta medida podría afectar al 6,6% de las viviendas de Balears, según se extrae de los datos del Instituto de Estadística de les Illes Balears (IBESAT), que aumenta hasta el 9% en los casos de familias con hijos dependientes, entendiendo estos como los menores de 18 años y las personas de 18 a 24 años económicamente inactivas.
Además, el Ibestat indica también que el 18,1% tiene problemas para hacer frente a los gastos domésticos (entre ellas la factura energética), porcentaje que en el caso de familias con hijos llega hasta el 23,2%.
La Presencia de entidades sociales en la Mesa de la Pobreza, que conocen de primera mano el problema porque son las que día a día están en contacto con los afectados, será determinado para poder articular medidas no ya de emergencia sino también para articular medidas de lucha.