El Ejecutivo comunicará con 48 horas de antelación a la familia de Franco el día exacto y la hora en la que tendrán lugar la exhumación y posterior reinhumación de los restos del dictador en el cementerio de El Pardo-Mingorrubio para que pueda asistir si lo considera oportuno.
Calvo ha explicado que aún no se ha fijado la fecha concreta porque el Ejecutivo necesita unos días para tener el Valle de los Caídos "cerrado" y en condiciones de seguridad.
"No hay más", ha garantizado.
Tal y como ya había adelantado, los medios de comunicación no tendrán acceso al interior de la basílica para garantizar la intimidad y el respeto de la familia y la debida discreción.
No obstante sí se habilitarán espacios para los medios en aquellos espacio que garantice el derecho a la información pero no en espacio "estricto y cercano" reservado a la familia.
Calvo ha explicado que ha sido el propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el que ha elevado este acuerdo al Consejo de Ministros que supone la culminación de la aplicación de la Ley de Memoria Histórica, que prevé que los restos del dictador salgan de "un lugar de enaltecimiento".
El objetivo final, ha recordado, es no tener al dictador, "artífice de un pasado negro en la historia de nuestro país", en una tumba de Estado, sino que deben estar en un lugar privado, el madrileño cementerio de El Pardo-Mingorrubio, donde ya reposan otros miembros de su familia.
Calvo ha expresado su satisfacción por cerrar con "dignidad" lo que, a su juicio, no era digno, que un dictador ocupara una "tumba de Estado" y lo ha dicho con el pronunciamiento y el aval de los tres poderes del Estado, el Gobierno, las Cortes y finalmente el Tribunal Supremo.
"Queremos que ese lugar se circunscriba a la paz al perdón y a la justicia de las víctimas de la contienda", ha subrayado la vicepresidenta del Gobierno, que considera que se trata de un "logro de todos".