El ERE de Bankia ha tenido consecuencias muy drásticas para Menorca. Todas las oficinas de la isla cerrarán y sus trabajadores serán despedidos.
Ante esta situación los aún empleados de la entidad han emitido una carta pública en la que se lamentan de que “La decisión tomada por la alta dirección de Bankia significa un desprecio a todos los clientes de Menorca” y de que se haya demostrado que “no les importamos lo más mínimo, ni nosotros los empleados ni los clientes”.
Tal y como recuerdan en la misiva, “Baleares y, más concretamente Menorca, es una de las zonas más afectadas en este proceso de demolición de Bankia, donde más se ha ensañado el hacha del verdugo”.
Los trabajadores arremeten de manera muy dura contra la dirección de Bankia cuando recuerdan que “en contra de lo manifestado públicamente por el presidente, “lo más importante son las personas”, sólo éramos un número, un simple número de poco valor”.
Ante la situación de redimensionamiento económico de Bankia, los trabajadores critican que no se les haya ofrecido la posibilidad de franquiciar la marca de forma autónoma.
