La aparición del hongo Aspergillus en los quirófanos del Hospital Son Espases ("uno de los más modernos de Europa", según la campaña publicitaria que ha empapelado media Mallorca, como si se tratara de una campaña electoral) ha logrado un hecho inaudito: la desaparición mediática del conseller de Salut, Vicenç Thomàs. Todos nos habíamos acostumbrado a ver cada día varias fotos del conseller en la prensa local y ahora, de repente, el conseller está desaparecido. Vicenç Thomàs ya tuvo que retrasar el trasladado a Son Espases tras las presiones de los médicos de Son Dureta y de los sindicatos sanitarios, pero ahora con la historia del hongo no ha querido dar la cara. Y es que esta desaparición tiene su lógica. Thomàs no quiere dar la sensación de que esta mudanza a Son Espases se ha hecho deprisa y corriendo, que es lo que finalmente está pasando. La falta de enchufes, el nuevo y complicado sistema informático que tiene el nombre de la saga de Stieg Larsson, la incompleta instalación de los equipos y del mobiliario y, ahora, la estresante limpieza y esterilización de los quirófanos nos está demostrando que alguien está metiendo prisas con Son Espases. Eso sí, los fans del desaparecido conseller de Salut todavía lo pueden encontrar hoy en los suplementos sobre el nuevo hospital que salen publicados en el Diario de Mallorca y en el diario El País
