El Mallorca no se levanta tampoco ante el Levante

No pudo ser. Nuevamente el Real Mallorca se ha marchado de vacío como visitante tras caer derrotado ante el Levante (2-1), en un partido que se le puso muy de cara al cuadro de Vicente Moreno cuando, a pocos minutos para el final, el equipo local se quedó con nueve jugadores por la expulsión de Campaña y la lesión de Rochina.

Sin Lago Junior, que se quedó en la isla por sus problemas físicos, pero con la inclusión de Salva Sevilla, una vez cumplido su partido de sanción, Moreno puso en liza a su once más previsible, confiando a Fran Gámez la banda izquierda de la zaga para suplir la baja de Lumor. El partido empezó con buen pie para los mallorquinistas después de que, apenas disputado el primer minuto de juego, el entrenador local, Paco López, se viera obligado a efectuar su primer cambio a causa de la lesión de Melero, al que sustituyó Rochina. No habían transcurrido ni cinco minutos cuando el central Postigo tuvo que retirarse del terreno de juego para que Óscar Duarte ocupase su lugar.

Con dos de los tres cambios reglamentarios ya agotados, los valencianos iniciaron el choque con relativo desconcierto, circunstancia que aprovechó el Mallorca para acercarse al área y crear alguna que otra ocasión. La más clara, sin duda, la protagonizó Budimir en el minuto 12, pero su remate de cabeza lo sacó el portero Aitor Fernández desde la misma línea de gol. Por parte levantinista, su hombre más peligroso, Roger Martí, pudo batir a Reina en el 37, pero el cancerbero mallorquinista atrapó con acierto el balón.

El Levante empezó la segunda mitad con fe renovada en sus posibilidades, y a los 5 minutos un cabezazo de Roger significó el primer gol para el cuadro de Orriols. Fueron los peores momentos para el Mallorca, desbordado por las acometidas de los levantinistas, pero, contra todo pronóstico, en el minuto 64 una buena asistencia de Kubo habilitó a Joan Sastre por la banda derecha y la pelota hacia atrás del defensa de Porreres lo cazó Dani Rodríguez para establecer el empate.

De nuevo con las tablas en el marcador, Vicente Moreno movió el banquillo y dio entrada a Josep Señé para dar descanso a Salva Sevilla. Poco después, Pablo Chavarría reemplazó a Aleix Febas. Para entonces, el Levante se había puesto otra vez por delante gracias a un zapatazo inapelable de Rochina ante el que nada pudo hacer Reina.

Los aficionados granotas se las prometían felices, pero la realidad es que faltaban por llegar los fuegos de artificio de un vertiginoso final digno de las más inquietantes historias de intriga. Con el Mallorca volcado sobre la portería de Aítor Fernández, Campaña perdió los nervios y agredió sin contemplaciones a Dani Rodríguez, viendo la tarjeta roja.

Ahí no acabaron los problemas para el Levante, ya que casi acto seguido Rochina tuvo que retirarse del campo a causa de sus problemas físicos. Los locales quedaban con tan solo nueve jugadores sobre el césped y al Mallorca se le abría de par en par la oportunidad de sumar, al menos, un punto en su visita a Orriols. Y casi lo logró: con el tiempo ya cumplido, Aítor Fernández realizó una parada magistral a lanzamiento de Kubo, y, segundos antes de que el árbitro decretase el final del encuentro, Abdón Prats, que se había incorporado al juego pocos minutos antes, estrelló el balón contra el larguero.

Final cruel para el Mallorca, que sigue sin puntuar lejos de Son Moix y que deberá disputar a domicilio tres de los próximos cuatro compromisos, uno de ellos en el Camp Nou. Mientras tanto, a expensas de los resultados que se produzcan en el transcurso de esta jornada recién iniciada, el abismo de las zonas de descenso está a tiro de piedra de los bermellones.