El partido del Mallorca contra el Villarreal se presenta como una vendetta por la jugarreta del verano que le sirvió al submarino amarillo para hacerse con la plaza bermellona para la Europa League. El equipo de Michael Laudrup es consciente de la dificultad del encuentro pero acude a la cita con el objetivo de sacar lo máximo: los tres puntos. Pep Lluís Martí ha sido muy claro durante la rueda de prensa y ha dicho que “intentaremos devolverles en el terreno de juego lo que nos quitaron en los despachos”. El jugador del Mallorca ha reconocido que para toda la plantilla es un partido especial tras la sensación de impotencia que se les quedó en verano tras perder su plaza europea. Martí es consciente de que el Villarreal es un rival superior, tal y como lo demuestra el hecho de que van arriba en la tabla, pero afirma que el Mallorca tiene doble motivación para buscar la victoria. Por un lado, la sed de venganza por lo de la Europa League y por otro dar una alegría a la afición tras las últimas derrotas.
