Vade retro. Manzano está siendo estigmatizado por directivos y comentaristas complacientes porque un día quiso defender sus derechos. Que sueldo y primas fueran altos y que el Mallorca fuera a concurso de acreedores y no pudiera jugar la Europa League convendría achacárselo a los anteriores propietarios, directivos y asesores. Pero se ha intentado influir en el aficionado para culpar a empleados del club de los males que provocaron los que tenían la capacidad para comprar y vender, para ganar o perder, para realizar negocios o prácticas de ida y vuelta sin perder nada. Pero, eso sí, que Manzano renuncie a sus derechos por el bien del Mallorca. Y también jugadores y empleados. Bueno, pues llegados a este punto, el Mallorca fue a Sevilla con la sensación de que iba a medirse en singular batalla contra Manzano. Y ahora también que el Mallorca va a luchar con Manzano en Son Moix. No, este entrenador fue un buen entrenador para el Mallorca, aguantó como nadie hubiera hecho, consiguió mantener al grupo, llevó al equipo a una clasificación histórica dadas las circunstancias y fue ejemplo nacional de seriedad y buen hacer. Aunque a uno no le guste el esquema de juego de Manzano, debe reconocer que lo hizo muy bien. Y puede que en asuntos de perder dinero nadie tenga amigos, pero no se le puede considerar un enemigo. El rival es el Sevilla. A saber quién enfoca este partido como una venganza.
