Esta semana ha trascendido el punto de autodestrucción en el que se encuentra el vestuario del próximo rival del Real Mallorca. Según algunas informaciones, el jugador Barkero encendió la mecha hace algunas semanas, enfrentándose a una parte del vestuario en la que figuran pesos pesados como Ballesteros, Juanfran, Juanlu y Munúa.
El "mal rollo" se origina cuando Barkero se queja de la falta de intensidad de algunos jugadores en el partido que el Levante perdió ante el Deportivo de La Coruña.
Tanto el entrenador como los capitanes han tenido que intervenir y no trascienden síntomas de que se haya ni tan sólo parcheado el deterioro en el vestuario. Una cena el pasado martes intentó calmar las aguas.
Un mal ambiente que, además, se ha traducido en los resultados: el Levante no ha marcado ni un gol en los últimos 3 partidos, que ha saldado con derrota en los tres casos.
