"Nos queda pendiente una mayor sensibilización sobre los productos de usar y tirar". Son palabras de Xesca Martí, directora general de la Fundació Deixalles, en una entrevista concedida a mallorcadiario.com en la que aborda, entre otras cuestiones, la labor medioambiental de la entidad así como la importante tarea de concienciación social al respecto que realizan.
Martí lamenta que la sociedad siga consumiendo "demasiados" productos de un solo uso en vez de optar por elementos reutilizables o de mayor calidad, lo que supone una mayor vida útil. La directora de Deixalles pone como ejemplo la ropa de hoy en día: muy barata y muy mala. Prendas y calzado que cuestan muy poco -lo que permite comprar más- pero que al cabo de un corto espacio de tiempo acaban en la basura. De la fast food a la fast fashion.
En pleno debate internacional sobre la emergencia climática, con unos datos de destrucción medioambiental sobrecogedores e irreversibles, urge concienciar a la sociedad sobre la necesidad de no comprar compulsivamente y de hacerlo siempre bajo el criterio de 'menos pero mejor' ya que la cultura actual de la sobreabundancia es del todo insostenible.
Además, desde una perspectiva económica, la apuesta por la reutilización o la compra de materiales más resistentes también supone un ahorro. La Fundació Impulsa publicaba hace algunos meses un informe en el que cuantificaba el ahorro que supondría la implementación de la economía circula a las empresas turísticas: 175 millones cada año. El porqué de la cifra se explica con el descenso de entre un 15 y un 20 por ciento del gasto en materias primas, que asciende actualmente hasta los 800 millones anuales. Eso, trasladado a la economía doméstica, también repercute en un ahorro importante cada mes.
Por ello, las oportunidades que ofrece Deixalles (muebles, electrodomésticos, decoración, ropa, costura, juguetes, etc.) además de ser una opción socialmente responsable son un buen paso en la contribución individual contra el cambio climático.