La alcaldesa y secretaria general de los socialistas de Son Servera, Natalia Troya, ha lamentado tener que defender ante los Juzgados la legalidad del derrumbe de la Cruz de los Caídos del municipio, una actuación decretada por el Consistorio el pasado octubre y sobre la que pesa una denuncia formalizada por el partido político Vox.
Troya ha declarado tener "total tranquilidad", ya que con el derrumbe se ha dado cumplimiento, según ha indicado, a la Ley de Memoria Histórica, "que obliga a eliminar todos los símbolos y distinciones franquistas en las islas".
La alcaldesa ha destacado que defenderán en los Juzgados la legalidad de la demolición, puesto que, siguiendo su argumentacion, "no se ha eliminado una cruz cristiana, sino un monumento que se había instalado para homenajear a los caídos del bando fascista".
Para Troya, se trata "de un símbolo que no podemos mantener como sociedad democrática. Con su eliminación se hace justicia y reparación a las víctimas".
Por otra parte, ha recordado que, además del derrumbe de la cruz, el pasado mes de octubre, este espacio de la localidad será objeto de una remodelación integral para adaptarlo a las necesidades de la gente mayor, con la eliminación de barreras arquitectónicas, la adecuación de los baños y la creación de pistas de petanca.
