La presidenta Armengol ha defendido el consenso alcanzado en torno a la nueva Ley Turística de Baleares durante el pleno del Parlament de este miércoles. En el debate previo a la aprobación de la nueva norma el PP ha pedido al Govern que retire el decreto de turismo, por haberlo "impuesto sin consenso".
Armengol ha asegurado que la futura ley turística de Baleares "está consensuada" y ha destacado que es una normativa que "va con los trabajadores y trabajadoras" y defiende que "los sindicatos son una parte fundamental de esta comunidad".
Así ha respondido la presidenta del Govern, Francina Armengol, a la pregunta formulada este miércoles en el pleno del Parlament por el Grupo Parlamentario Vox, a quien ha recriminado que haga las mismas preguntas que el PP "por falta de imaginación o de trabajo".
En esta línea, Armengol ha resaltado que "estar con el turismo es trabajar para hacer posible que haya turismo" y ha reprochado a Vox que hayan votado en contra de los 855 millones de euros para las empresas de las Islas o que no hayan querido participar en el pacto de reactivación de Baleares.
"Se han puesto de perfil para favorecer el turismo, solo piensan en los intereses de su partido", ha lamentado la presidenta.
"FAVORECER A LOS PODEROSOS"
El portavoz parlamentario de Vox, Jorge Campos, ha llamado "máquina de favorecer a los poderosos y perjudicar a los pequeños y desfavorecidos" a la presidenta del Govern, Francina Armengol, por la ley turística, a lo que la mandataria ha replicado cuestionando la postura de Vox en relación con la circularidad y el crecimiento turístico.
En el turno de control al Govern en el pleno del Parlament, Campos ha preguntado a Armengol si hay habido acuerdo para modificar la ley de Turismo, a lo que la presidenta ha respondido: "Sí, la ley está consensuada".
Por su parte, el conseller de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha defendido el consenso y el acuerdo de la ley turística y ha recordado al PP -tres diputados han preguntado al conseller por la cuestión- que aprobó tres decretos en materia de turismo "sin hablar con nadie".
Hasta en tres ocasiones, los diputados populares Maria Salomé Cabrera, Sebastià Sagreras y Javier Bonet, le han preguntado al conseller con quién se ha consensuado la reforma de la ley turística. "Parece que les moleste que pactemos", ha dicho el conseller.
El conseller ha admitido que en las reuniones hay tensiones y discusiones, pero ha insistido en que el consenso ha sido "prácticamente total".
"Todos cedemos y todos ganamos, eso es el diálogo social", ha insistido Negueruela.
EL PP PIDE LA RETIRADA DEL DECRETO
La diputada del PP Salomé Cabrera ha pedido al Govern que retire el decreto de turismo, por haberlo "impuesto sin consenso", el mismo día que está previsto que el pleno debata su convalidación.
Negueruela ha defendido el decreto de turismo del Govern y ha rechazado las críticas del PP, asegurando que su política turística cuando gobernaban fueron tres decretos leyes consecutivos "de crecimiento en ladrillo".
En el turno de control al Govern en el pleno del Parlament, el diputado del PP Sebastià Sagreras ha cuestionado el decreto de turismo por falta de consenso, a lo que el conseller ha dicho que el Govern aplica el diálogo social y ha evitado la conflictividad.
Sagreras ha reprochado a Negueruela que al sector agrario no le ayudará "en nada" la circularidad planteada en el decreto de Turismo, en el que no hay nada que apoye al producto local, y ha pedido apoyo a los agroturismos y a los payeses que mantienen el paisaje.
El conseller de Turismo ha defendido que la normativa "por primera vez se fija en la circularidad y en estándares alimentarios en la ley turística".
"Ustedes lo único que han potenciado en las normativas turísticas impuestas, con tres decretos leyes consecutivos, ha sido crecimiento en ladrillo. Los ladrillos no se plantan en la tierra y es la política que ustedes hacían", ha dicho Negueruela.
En respuesta a otra pregunta de la diputada del PP Salomé Cabrera el conseller ha asegurado que las discrepancias han surgido porque el Govern ha buscado el diálogo.
Cabrera ha criticado "las formas autoritarias y trileras" de Negueruela y le ha acusado de querer "imponer su credo" y aplicar "el método Negueruela de matonismo y chulería". Le ha pedido que devuelva el decreto de turismo "al cajón" y aplique verdadero diálogo "sin imposiciones".
