Tras unas jornadas de entrenamientos, este lunes comienza la Copa del Rey de Vela, que celebra su edición número 41 en la bahía de Palma. La flota tiene por delante seis jornadas de competición en las que participarán un centenar de equipos de 16 países, con un total de 1.500 regatistas que lucharán por que el éxito en alguna de las ocho categorías que incluye la regata
La 41 Copa del Rey MAPFRE -organizada por el Real Club Náutico de Palma y la Real Federación Española de Vela, con el patrocinio de MAPFRE y la colaboración del Govern balear, el Ayuntamiento de Palma, la Autoritat Portuaria y la Federación Balear de Vela- constituye el principal evento deportivo que se celebra en las Islas, con una proyección mundial por el nivel y el número de participantes, tanto profesionales como amateurs.
Como parte de un patrimonio ya consolidado a lo largo de las 41 ediciones, a la proyección mundial de la regata y a los beneficios que conlleva cabe sumar, además, la presencia del rey Felipe VI, al timón del Aifos, el velero de la Armada que compite en la categoría Majorica ORC1 junto a otras catorce embarcaciones de seis países. El Rey se convierte así, un año más, en el mejor embajador de la regata, coincidiendo con la tradicional estancia veraniega de la Familia Real en Marivent.
La regata constituye ya un acontecimiento esencial para la capital balear, más allá de los aspectos meramente deportivos, situando a Palma como escenario de actividades sociales o solidarias que complementan la competición protagonizada por los regatistas. Todo ello mueve una cantidad de recursos que suponen ingresos millonarios para Mallorca; se calcula que la edición del pasado año generó un beneficio directo de 18 millones de euros, derivado de las diferentes actividades de transporte, alojamiento, restauración y ocio que requirieron tanto los equipos como los asistentes en alguna de las actividades.