He decidido no dar pábulo a las declaraciones de Maheta Molango para no seguir colaborando con su discurso fingido, por usar una expresión suave. Hoy ya no le creen los verdaderos mallorquinistas ni el conjunto de la sociedad mallorquina, pese a su demostrado apego a los empresarios extranjeros y su manifiesta envidia para los locales. No voy a perder ni un minuto más en desmentir las tonterías reiteradas del consejero delegado del Mallorca que se comporta como si los seguidores del club que regenta fueran imbéciles. Hagan sino un recuento de sus bravuconadas más ridículas:
- Los jugadores que en noviembre no hayan rendido lo esperado serán despedidos. (Todos siguen aquí, salvo Damiá)
- No pago el desayuno de los futbolistas para deambular por la décimo sexta posición. (Pero si por debajo)
- No me han pedido permiso para salir por la noche después de perder con el Numancia. (Ya estaban de vacaciones)
- Estamos buscando una salida a Oscar Díaz, Salomao y Oriol. (También continúan aquí)
- Fernando Vázquez es mi entrenador. (Pues menos mal)
- Sólo ficharemos para mejorar lo que tenemos. (Pues si que es mala la plantilla)
- Confiamos en los jóvenes y la cantera. (Un juvenil vendido por 50.000 euros al Villarreal, un cadete en Inglaterra y locos por traspasar a Elías)
- Saúl es uno de los laterales zurdos de Segunda con mayor proyección. Angeliño ha jugado la Champions. (Por eso el Girona no ha querido a ninguno de ellos)
- Olaizola es como Cúper o Luis Aragonés. (Si, por esto ficharon antes al Chapi Ferrer y a Fernando Vázquez)
- Amb tu ferem por. (Y tanta, huimos despavoridos)
- Si fuera mejor gestor a lo mejor no estaría trabajando en el Mallorca. (Por fin, una verdad)
- Hemos de recuperar al mallorquinismo perdido. (Preguntéselo a los copropietarios del Lluis Sitjar)
- Pagamos las deudas que generaron otros. (¿Pero no se habían mirado los papeles al dedillo?
- Robert Sarver seguirá la temporada próximo al 110 por ciento. (Jajajaja. Ya Veremos. A lo mejor hablaba del incremento de las pérdidas)
En fin, lo dejamos aquí para no ser pesados. En el fondo este tío es un filón.