La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha defendido que la reforma educativa pretende retirar "los desequilibrios" en la educación concertada para que "avance y trabaje" junto a la pública.
"La educación no es una mercancía, está sujeta a la programación", ha señalado en una entrevista en La Sexta, en la que ha asegurado que durante el Gobierno de Rajoy se retiraron "recursos importantes" de la educación pública. A su juicio, es preciso actuar sobre ella con "un sistema de compensación" porque funciona como un "eje vertebrador" y "representa el pluralismo de la sociedad".
Sobre la LOMLOE, la ministra que explicado que la educación concertada "se respeta, existe y cumple son sus fines sociales" de "trabajar en el sistema y acompañar a la pública". "No toda la concertada es igual", ha avisado Celaá, al tiempo que ha alertado sobre "desequilibrios" en estos centros educativos que son "imprescindibles retirar" para que "avance y trabaje" junto a los colegios e institutos públicos.
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En este sentido, ha aclarado que "la programación de la enseñanza es competencia de las administraciones públicas", que deben velar por "cuántas plazas de calidad tienen que ofertar". "Esto no es un negocio", ha apuntado, para después recalcar que "la demanda social" que señalaba la LOMCE "ha desaparecido" pues "la programación es competencia de las administraciones para establecer su oferta".
Preguntada por la declaraciones del expresidente del Gobierno José María Aznar, en las que decía que "intentar exterminar el castellano en Cataluña y País Vasco es una majadería", la titular de Educación ha aclarado que "la libertad de enseñanza está perfectamente y consagrada en el proyecto de ley". Además, ha preguntado que si el castellano "sufría antes de la LOMCE" cuando se estableció como 'lengua vehicular'. "La disposición adicional es garantista", ha reclamado.