La finca, adquirida por expropiación en 2023 por un importe de 11 millones de euros, cuenta con un destacado valor natural y patrimonial, ha informado este domingo el Ayuntamiento de Calvià.
El proyecto contempla una primera fase de actuación centrada en la limpieza y adecuación de la zona. En esta primera actuación se apuntalarán dos viviendas del arquitecto Josep Ferragut, catalogadas como Bien de Interés Cultural. También contempla la consolidación de una torre de defensa del siglo XVII.
Igualmente, se procederá a la redacción del proyecto definitivo que determinará los futuros usos del espacio.
Para llevar a cabo esta primera parte, habrá una financiación de casi un millón de euros, procedentes del Impuesto de Turismo Sostenible (ITS) del Govern.
El alcalde de Calvià, Juan Antonio Amengual, ha subrayado que el propósito del consistorio es "convertir este enclave en un espacio público de referencia, un lugar de encuentro tanto para residentes como para turistas".
La previsión es que, tras la fase inicial de adecuación, la finca pueda abrirse al público de manera preliminar en mayo de 2026.
Con este proyecto, Calvià refuerza su estrategia de puesta en valor de espacios emblemáticos del municipio.
Ejemplos de ellos son la propia torre de Torrenova, el Parque Arqueológico del Puig de sa Morisca o la finca pública de Galatzó, donde está prevista una inversión de 5,7 millones de euros en su primera fase de reforma.