Buen día para ganar

Como en fútbol la parte anímica es facto decisivo, nunca se sabrá si el Bilbao no hizo más por la confianza complaciente de estar en puestos de ataque a la Champions, menospreciar al Mallorca o jugar en una noche de lunes desapacible. No aparecieron ni Muniain, ni Martínez, ni Toquero ni Llorente. Menos mal. Tampoco se sabrá si el Mallorca ganó por convencimiento de que en Son Moix le puede ganar a cualquiera, porque tenía que hacer un sobreesfuerzo para quitarse complejos o porque jugaba en una noche de lunes, su día soñado. En cualquier caso, este equipo demostró que está fundido. Ya en la segunda parte del encuentro que empató en Osasuna, la táctica fue de balones fuera y pases largos. Ante el Athletic, lo mismo. En circunstancias normales, con un delantero hábil, el partido tenía que haber quedado resuelto en media hora, porque el Bilbao no apareció, y dejar la segunda parte para adornarse con el contraataque y abultar el resultado, pero no está el tiempo para dispendios. El Chori no termina de asimilar que este va a ser su trabajo hasta el verano, Webó es lo que es y no se le puede pedir más, Nsue hace una jugada bien y nueve mal, De Guzman se parte el pecho y derrocha técnica pero no puede estar como Dios en todas partes… Sólo nos queda la solvencia del esquema defensivo cuando juegan Nunes y Ramis o Nunes y Rubén. Así las cosas, uno tiene que acostumbrarse a lo que hay, a considerar cada punto un tesoro, a sufrir, a ir al campo en lunes, día raro para el equipo contrario, día en que el Mallorca está en sus salsa.

Suscríbase aquí gratis a nuestro boletín diario. Síganos en X, Facebook, Instagram y TikTok.
Toda la actualidad de Mallorca en mallorcadiario.com.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Más Noticias