Un agente de la Policía Nacional ha resultado herido leve después de haber sufrido el ataque de un perro de la raza 'pitbull' mientras estaba trabajando en el control de un incendio ocurrido este domingo, de madrugada, en una caseta del polígono de Son Fusteret, en el Camí Vell de Bunyola.
Según ha informado la Policía Nacional en declaraciones a Europa Press, el agente se había desplazado hasta la zona, donde se había decretado el siniestro en torno a las 2 de la madrugada, con la intención de colaborar en las labores de habilitación del área en la que debían intervenir los Bomberos de Palma para iniciar la extinción de las llamas.
En ese momento, el funcionario policial ha advertido la presencia próxima de un 'pitbull' que se encontraba atado a un árbol. Siempre según la versión facilitada por la Policía Nacional, el agente ha solicitado al propietario del animal que le trasladase a un lugar más alejado. Sin embargo, el can se ha librado de sus ataduras y ha atacado al policía, que ha sufrido dos mordeduras, una de ellas parcial, en el lateral de la cara, y otra en la parte trasera del cuerpo.
De acuerdo con la explicación facilitada por el CNP, el agente ha reaccionado efectuando un disparo intimidatorio con el objetivo de que el perro dejase de morderle, y, asustado por la detonación, el 'pitbull' se ha refugiado entre unos matorrales, de donde su dueño ha tratado de sacarlo con un lazo de acero que le había sido facilitado por parte de técnicos de Son Reus. Sin embargo, los esfuerzos del propietario por rescatar al can han ocasionado que el 'pitbull' se ahogara y acabara falleciendo.
El agente policial, por su parte, ha sido trasladado a una clínica privada, donde se ha estimado que las heridas no revestían gravedad y que no era necesario proceder a su ingreso hospitalario.
LOS BOMBEROS HAN TENIDO QUE ACUDIR DOS VECES
En cuanto al incendio en el que trabajaba el agente, cabe destacar que el siniestro se ha declarado a las 2 de la madrugada en una caseta situada frente a Son Fusteret, en el Camí Vell de Bunyola. Al respecto, fuentes de los Bomberos de Palma han explicado que el origen del fuego se hallaría en unos rastrojos, si bien el incendio se ha ido extendiendo hasta alcanzar la caseta.
Los bomberos han apuntado que el emplazamiento se hallaba "extremadamente sucio" y repleto de todo tipo de enseres que constituían un serio riesgo para la propagación de las llamas: desde ropa y residuos hasta libros e incluso neumáticos. Esta circunstancia permite suponer que el lugar era habitado o frecuentado por una o varias personas en situación de vulnerabilidad económica.
Las labores de extinción se han prolongado durante unos 90 minutos. Sin embargo, horas después, sobre las 6 de la madrugada, efectivos de los Bomberos de Palma han tenido que regresar al mismo lugar tras recibir la alerta de que el fuego se había reavivado. En esta segunda intervención, el dispositivo se ha limitado a refrescar la zona para impedir que el siniestro cobrase vida por tercera vez consecutiva.
