Más embarcaciones, más expositores, mayor superficie. Palma acoge desde este viernes la 35 edición de la Boat Show, la cita más importante de las islas con la náutica y una de las paradas obligatorias en el circuito europeo.
El nuevo diseño del recinto ferial supondrá una remodelación de las zonas de exposición con el objetivo de optimizar todavía más el escenario del Moll Vell. De hecho, la instalación de un puente flotante que une el Espigón de Consigna con el Muelle de la Industria Pesquera permitirá un recorrido circular que evitará zonas frías en el recinto ferial. Esta infraestructura temporal tendrá una longitud de 72 metros y una anchura de 5 metros, y permitirá la entrada y salida de las embarcaciones una vez concluida la jornada de feria. Además de facilitar la visita al salón, la pasarela flotante supondrá un atractivo más ya que ofrecerá una perspectiva diferente del Palma International Boat Show y del Puerto de Palma.
El conseller Negueruela ha asegurado que “a causa de la gran demanda de empresas que quieren participar en este evento, uno de los salones náuticos de referencia a nivel europeo, se ha hecho un gran esfuerzo para incrementar la superficie de exposición, sobre todo la marítima”.
Cabe destacar la exposición del área del Palma Superyacht Show que un año más ofrece la mayor muestra de superyates de Europa con 80 barcos de más de 24 metros de eslora. Además, contará con la segunda edición del área de Refit & Repair. Este sector se separa del resto del salón al dirigirse específicamente a expertos y profesionales de la náutica y tuvo muy buena acogida por parte de los expositores y visitantes durante su debut en 2017. El área Refit & Repair de este año tiene un 25% más de stands y estará más integrada en el resto de la exposición en comparación con el año pasado.