Maite Areal, mujer del expresidente del Govern, Jaume Matas, quien ha declarado como testigo en el segundo juicio que se celebra contra su marido, ha asegurado que dio a conocer el hotel en el que estaba contratada en Mallorca -contratación que supuestamente sirvió
para encubrir una dádiva de 42.111 euros del propietario del establecimiento -en favor del exmandatario balear- al exportavoz del PP en el Congreso Eduardo Zaplana, así como a diferentes diputados y senadores.
"Yo me relacionaba con mucha gente", ha aseverado Areal durante su comparecencia en la vista oral, en la que ha expresado inicialmente sus reticencias a proporcionar los nombres de las personas a quienes ofrecía propaganda sobre el hotel por más de 2.900 euros mensuales.
"No voy a decir el nombre de nadie, no les voy a comprometer ni quiero perjudicar a mi marido", ha manifestado Areal, respondiéndole el fiscal si ello se debe a que realmente no presentó el producto a nadie.
Sin embargo, finalmente la testigo ha hecho alusión a Zaplana así como al presidente de la Fundación Kovacs y el empresario José Manuel Maíz como algunas de las personas a las que presentó las características del complejo hotelero en el marco de las funciones que ella tenía como responsable de relaciones públicas.
A preguntas de Horrach, Areal ha manifestado que ha hecho "muchas cosas distintas con tal de trabajar, como todo el mundo", y ha llegado a manifestar que Matas
"limitaba mucho mi futuro profesional" lo que hizo que se enfadara "mucho" con él, porque "lo de presidente era muy beneficioso para todo el mundo pero no para mí. Todo me era incompatible". Es por ello que, ha recordado, su marido se puso en contacto con el administrador del hotel Valparaíso, Miquel Ramis, de quien son amigos, para pedirle trabajo para ella.