La candidata eslovena a Comisaria Europea, la expresidenta Alenka Bratusek, se ha visto obligada a presentar su renuncia después de que la Eurocámara rechazara de forma abrumadora su candidatura. A pesar de ser propuesta por su país y presentada por el presidente electo, Jean Claude Junker como vicepresidenta de Energía, el Parlamento la consideró poco cualificada para el cargo que le habían adjudicado.
Los Comisarios han sido elegidos, por primera vez, por el propio Parlamento. Una comisión de parlamentarios revisa el perfil de los candidatos, sus potenciales conflictos de intereses y su experiencia profesional. En este proceso se clarifican muchas de las circunstancias que permiten establecer su idoneidad. Este ejercicio de evaluación garantiza que los máximos representantes de la Unión estén cualificados para el cargo que van a desempeñar.
Para ejercer cualquier actividad se precisa una determinada cualificación que no se exige en los nombramientos políticos. Esta falta de competencia es la base de muchos de los errores, desaciertos y calamitosos resultados de gestión pública. Todas las personas tienen una importante función que cumplir en la sociedad que se desvirtúa al ser colocados en áreas que desconocen. A ellos se les aboca al fracaso; a los ciudadanos les inclina hacia la desafección.
La evaluación parlamentaria es una buena medida. Previene el “principio de incompetencia de Peter”, descrito por Laurence J. Peter, catedrático de Ciencias de la Educación de la Universidad de California hace casi medio siglo. El mismo principio había sido adelantado por el prestigioso filósofo español de principios de siglo XX José Ortega y Gasset, al afirmar que en una jerarquía, todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia. Esta ineptitud es la que lleva a la imposibilidad material de establecer los principios básicos de la función encomendada y les impide cumplir con los objetivos de su propio trabajo. Este mismo principio explica los frecuentes casos de acumulación de personal. No son sino un vano intento de poner remedio a la incompetencia de los superiores.
La Comisión Europea es una de las instituciones más importantes de la UE. Está constituida por 28 comisarios, uno por cada país representado. Se encarga de hacer cumplir la legislación, gestionar el presupuesto y asignar los fondos de la Unión. También representa a la UE en el ámbito internacional y es la responsable de negociar los acuerdos con otros países.
Este ejercicio de aptitud es una de las novedades de la legislatura. Representa uno de los principios básicos de regeneración política, fortalece la trasparencia y sobre todo garantiza la mejora del desempeño.
El sistema, sin embargo, adolece de un pequeño pecado original. Los examinadores son impuestos por la partitocracia, no pasan por un test previo de idoneidad en el país de origen y no está asegurada su valía. ¿Quién debería elegir a los examinadores?