Las competencias turísticas de Mallorca se gestionarán desde el Consell a partir del 1 de enero

Según ha informado la institución insular en una nota de prensa, este acuerdo había sido aprobado por la Comisión Mixta de Transferencias Govern-consells insulares y firmado por la presidenta, Catalina Cladera, y la consellera de Presidència, Funció Pública i Igualtat, Mercedes Garrido, el pasado 12 de noviembre.

El conseller insular de Turisme i Esports, Andreu Serra, ha intervenido durante el Pleno y ha destacado que se trata de "un momento importante para Mallorca", ya que "tener las competencias plenas en turismo supone un paso adelante para que el gobierno del Consell forme parte de la toma de decisiones, tal como está fijado en el Estatuto de Autonomía".

Serra ha añadido que, con el traspaso de competencias, se podrá dar cumplimiento al Plan Estratégico, desarrollado "desde la cogobernanza y el consenso". Por ello, según el conseller insular, la institución continuará "trabajando por una Mallorca con inteligencia turística, de calidad, sostenible y segura pospandemia".

EL ÚNICO CONSELL QUE NO DISPONÍA DE COMPETENCIAS TURÍSTICAS

El Consell de Mallorca era el único gobierno insular que no disponía de de competencias transferidas en esta materia. Ahora, con este traspaso, la institución que preside Catalina Cladera logrará pleno poder de decisión en el ámbito turístico.

Las transferencias se harán efectivas el próximo 1 de enero de 2022, con la única excepción del Consorcio Bolsa de Alojamientos Turísticos (CBAT), cuyo traspaso no se materializará hasta el 1 de abril y requerirá de la firma de un convenio específico entre el Consell y el Govern que preverá la modificación de los estatutos

El Consell de Mallorca, a través del departamento de Turisme i Esports, ejercerá así la planificación y la gestión de la oferta turística, la facultad inspectora y también la potestad sancionadora. Por tanto, serán atribuciones de la institución insular la titularidad y la gestión del registro insular de empresas turísticas; las actividades administrativas y de gestión en relación a las mismas previstas en la Ley del turismo; la actividad inspectora de establecimientos y la potestad sancionadora; la tramitación de quejas de usuarios; el trámite de cambio de uso de los establecimientos, y la emisión de informes o la declaración de municipio turístico, entre otros funciones.

El Consell también tendrá plenas competencias en cuanto a la gestión de los recursos turísticos de Mallorca, la implantación de políticas de calidad turística y de planes de modernización y el desarrollo de políticas de infraestructuras turísticas.

Finalmente, el acuerdo supone la incorporación al Consell de 61 trabajadores.