El Ayuntamiento de Andratx ha recuperado estos días el sistema de tratamiento contra la procesionaria que tan buenos resultados proporcionó el año pasado. Se trata de un método denominado endoterapia, que consiste en inyectar directamente al tronco de los árboles un líquido biocida que evita la proliferación del insecto.
El sistema se aplicará en todas las zonas urbanas públicas del municipio con presencia de pinos, poniendo especial énfases en las zonas de colegios y parques infantiles.
“Es un sistema mucho menos invasivo que los usados tradicionalmente y, vistos los buenos resultados obtenidos el año pasado, el primero que lo pusimos en funcionamiento, hemos decidido volver a usarlo para luchar contra el problema recurrente de la procesionaria”, ha declarado el regidor de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Andratx, Llorenç Suau.
El efecto de este tratamiento, que evita que las orugas formen los nidos en las ramas de los pinos, es de seis meses, y tiene una eficacia de entre el 95 por ciento y el 98 por ciento. Además, los orificios que se realizan para inyectar el líquido pueden ser reutilizados incluso durante años.
La procesionaria está considerada como el insecto defoliador más importante de los pinares españoles, pudiendo llegar a devastar pinares enteros si no se combate a tiempo. Además, las orugas están cubiertas de pelos urticantes que se desprenden y flotan en el aire, por lo que pueden provocar peligrosas reacciones alérgicas en personas y animales.