La diputada autonómica Montse Seijas, suspendida de militancia junto a Xelo Huertas y Daniel Bachiller, acusa al secretario general de Podem Illes Balears, Alberto Jarabo, de negociar los presupuestos autonómicos de 2017 -a los que Podem da apoyo- al margen del Consejo Ciudadano Autonómico. Y también, y lo que es más grave, de tener intereses personales en IB3, en los nombramientos de algún cargo directivo y en el aumento de trabajo de la productora de la que fue socio antes de entrar en política.
La credibilidad de Podem se disuelve como un azucarillo en un café caliente
Las acusaciones son de extrema gravedad y parecen ratificadas en la información que publica mallorcadiario.com sobre la contratación por parte del ente público IB3 a la productora Quindrop Audiovisuals, que entre abril y junio ha facturado 105.922,53 euros, cantidad muy superior a lo que dicha productora habría facturado anteriormente. Además, el hecho de que Joan Carles Martorell, actual director de IB3 Televisión, y persona que decide en gran medida las producciones que se contratan, sea un antiguo empleado de Quindrop, sería determinante en este importante aumento de la carga de trabajo de la sociedad en la que está la pareja sentimental de Jarabo, quien además fue socio propietario de la misma hasta hace bien poco.
Si la dirección de Podemos ha enviado al Comité de Garantías las acusaciones de Jarabo y Camargo contra Seijas, Huertas y Bachiller, a quienes se acusa de haber infringido el Código Ético de la formación y les ha suspendido cautelarmente de afiliación, ahora corresponde exigir explicaciones a Alberto Jarabo para que ofrezca su versión de los hechos y se defienda de las acusaciones vertidas contra él por Seijas.
Como se ve, la credibilidad de Podem se disuelve como un azucarillo en un café caliente. La maniobra de cargarse de un plumazo a dos diputadas críticas con la actual dirección, acusándolas de actuar para favorecer a Daniel Bachiller, puede salirle muy cara a Alberto Jarabo porque ni Seijas ni Huertas parecen dispuestas a aceptar dócil y calladamente esta aparente purga estalinista.
Seijas acusa a Jarabo de hacer lo que a ella se le imputa y Huertas está determinada a acudir a los tribunales para que se repare su honor cuando por su propio partido ha sido acusada de ser corrupta. Jarabo parece no haber calculado bien las consecuencias de sus actos y ahora es él quien debe dar explicaciones a la opinión pública y también a los miembros de su formación política porque la sombra de la corrupción ahora le alcanza a él, acusado por Seijas de beneficiar a su antigua empresa, en la que ahora trabaja su compañera sentimental.
Lo cierto es que los presupuestos que Podem apoya -pese a que no han sido consultados con el Consejo Ciudadano Autonómico, como recuerda Seijas, contemplan un importante aumento para IB3, lo que podría significar más dinero para las productoras, incluida Quindrop. El asunto es muy turbio y empieza a oler muy mal.