El Ayuntamiento de Palma ha decidido cerrar de nuevo este viernes con bandera roja las playas de Can Pere Antoni y Ciutat Jardí después de que se haya registrado otro vertido de aguas mixtas (pluviales y residuales) en la estación impulsora de Es Baluard y en el torrente Gros.
Según ha informado en un comunicado, las dos playas permanecerán cerradas por precaución hasta que el consistorio obtenga los resultados de los análisis de las muestras de agua.
Se trata de la sexta vez que se tiene que cerrar alguna playa de Palma por vertidos en el último mes.