Vecinos de Son Rapinya reclaman la apertura de caminos

La Asociación de Vecinos de Son Rapinya ha convocado una manifestación el próximo domingo para exigir la apertura de los caminos que aún siguen cerrados o que están abiertos de una forma muy precaria, que partirá en torno a las 10.30 horas de la rotonda frente a la gasolinera de dicha barriada.

La entidad ha explicado en un comunicado que mantiene encuentros con responsables del Ayuntamiento de Palma en busca de una solución porque la problemática se mantiene y ha señalado que es el consistorio el que "tiene que imponer la apertura de los caminos y fijar de forma clara e inequívoca la titularidad pública, los derechos de paso y el trazado de los mismos".

Según la junta directiva de la organización vecinal, el conocido como "Camino del Colesterol", un tramo del Camino Real de Puigpunyent, sigue cerrado pese a ser el más demandado por los vecinos, sobre todo quienes presentan más limitaciones de movilidad.

La pretensión de que el camino se desvíe por fuera del vallado del campo de golf, por zona calificada como Área Natural de Especial Interés (ANEI), "no es viable legalmente y tampoco solventa las necesidades de las personas que tienen más limitaciones", afirma la asociación de vecinos.

Según la entidad, en el camino abierto no se han quitado los bloques de hormigón que se hicieron para poner las puertas y el campo de golf "ha ido extendiendo su trazado y dando mordiscos al territorio, cerrando caminos transitados desde muy antiguo".

Los vecinos animan a manifestarse el domingo para "exigir al Ayuntamiento que defienda los derechos de la mayoría y ponga coto a la especulación privada sobre el patrimonio natural y cultural".

Con el lema "Por la defensa de nuestro territorio y de nuestro patrimonio natural y cultural", la manifestación del domingo comenzará desde la rotonda frente a la gasolinera de Son Rapinya, atravesará el barrio hasta la rotonda del CIDE y después la de Son Vida y rodeará el campo de golf hasta enlazar con el camino del cementerio de la Vileta, para terminar delante de las puertas que cierran el camino, donde se leerá un manifiesto.