La Policía Nacional ha informado que, días atrás, una víctima se personó en las dependencias de la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) en Manacor, para denunciar que está recibiendo amenazas y coacciones por parte de su ex pareja en su teléfono móvil, con la que tiene una orden de alejamiento y este no puede ni acercarse ni comunicar con ella por ningún medio.
La víctima manifestó que su ex pareja cumple condena en un centro penitenciario de la Península.
Al tener este dato, los agentes de la Policía contactaron con el centro penitenciario para confirmar que el hombre estuviera allí recluido, comprobando que si que está interno allí y que los reclusos no tienen acceso a internet, ni tienen teléfonos móviles entre sus pertenencias ya que está absolutamente prohibido.
Ante la evidencia de que el hombre estaba usando algún terminal con conexión, el director del centro dio orden de que se realizara un registro exhaustivo en la celda, que dio resultado positivo al encontrarse un móvil, que el recluso al ser descubierto rompió.
Tras todo ello, se ha dado cuenta a la autoridad judicial de los hechos y se procederá contra él por quebrantar orden de alejamiento.