Un hombre reconoce haber matado a hachazos una yegua en Pollença

El acusado de matar a una yegua en una finca de Pollença en 2021 ha admitido los hechos, pero justifica que el sacrificio "era la única opción para evitar que el equino siguiera sufriendo". El animal había quedado atrapado en un paso de ganado en una finca, y aunque permanecía inmovilizado, según sostiene la acusación, la yegua estaba "tranquila a la espera de poder ser rescatada", y que, ante las diferentes posibilidades como llamar al 112, a la Policía Local, al Seprona, a un veterinario o la conselleria con competencias, el hombre, de 63 años, "optó por golpear con un hacha al animal hasta la muerte, descuartizarlo y esconderlo, hasta que lo encontraron unos excursionistas".

Por tanto, para el abogado, la versión de poner fin al sufrimiento del equino dada por el hombre "es incompatible con los múltiples golpes y con una acción manifiestamente salvaje y cruel".

El juicio se ha celebrado este miércoles, aunque el suceso tuvo lugar en a abril de 2021, cuando un vecino llamó al acusado de que la yegua estaba obstaculizando el paso y decidió acabar con su vida para que no sufriera.

El Ministerio Público y la Asociación Balear de Abogados por los Derechos de los Animales (Abada), piden una pena de un año y medio de prisión y cuatro años de inhabilitación para ejercer cualquier trabajo que suponga contacto con animales. Se trata de la pena máxima en el Código Penal vigente en 2021, cuando ocurrieron los hechos. Ahora se contempla una pena máxima de dos años, aunque desde Abada reclaman penas mayores para frenar los delitos de maltratao animal.