Según las conclusiones del estudio "El rodaje de las dificultades y la soledad", elaborado por Universidad de Wageningen, lo que hay detrás de los populares
selfies no es ni egocentrismo, ni narcisismo. Lo que realmente hay
tras las autorretratos con poses sensuales y sugerentes es una llamada de auxilio ante la falta de sexo.La investigación realizada por el holandés
Christyntjes Van Gallagherevaluó las fotos unos
800 adictos al autorretrato y las comparó con la realidad de los protagonistas. ¿El resultado? La mayoría se escuda en los
selfies para ocultar su inseguridad y ausencia sexual.