También relató que se escuchó a la mujer llorar y que se oyeron ruidos que demostraban que se estaba produciendo una agresión.
Al llegar los agentes, encontraron a la pareja extranjera y vieron que la mujer presentaba moratones en la cara y restos de sangre en la boca. El hombre reconoció la discusión, pero negó la agresión.
La mujer, por el contrario, sí dijo haber recibido puñetazos en la cara y otras agresiones y denunció a su pareja.