Tiempos recios habemus y la incertidumbre nos acecha. Ruge la marabunta
No hay biografía que se precie, en la que no haya trayectos complejos y difíciles en los cuales hay sobreabundancia de francotiradores y de atajos que no llevan a ninguna parte. No podemos controlar los aluviones vitales que nos arrasan sin dique que los contenga. Es entonces cuando la amenaza de quiebra aumenta y con mucha frecuencia los desenlaces fatídicos son inevitables e irreversibles.
Luego consumamos la realidad, aunque esta, esté señalada por mojones recios. Es así como construimos nuestro rastro y cincelamos nuestro rostro.
La cuestión no son los tiempos recios que vivimos sino la insoportable levedad y flojera mental de los seudolíderes que okupan la res pública. Aquellos que organizan y muchas veces “secuestran nuestras vidas”. Aquellos que generan continuamente malentendidos sociales y conflictos entre los ciudadanos. En esto son unos campeones. Todos han hecho tesis cum laude sobre como generar algarabía social.
Estamos en la tormenta perfecta: tiempos recios y seudolíderes mediocres, incompetentes y mendaces. Es decir, le echan gasolina al fuego. Paganos: los ciudadanos.
Los seudolíderes políticos y para muestra el presidente del gobierno, están instalados en la mitomanía y en la intolerancia a la frustración. Padecen de una adolescencia crónica. Todavía el cortex frontal (juicio de la realidad, ética y valores) está en proceso de maduración y no lleva las riendas del sistema límbico. (emociones, impulsividad).
Nuestro problema es que es el presidente del gobierno y tiene poder.
Si la ejemplaridad publica debería ser el ADN del buen político, el señor Sánchez, está huérfano de ella. Todo es vanidad y correr tras el viento. Todo es impostura. Todo vale. Yo, mí, me conmigo. Narcisismo en estado puro. Ya lo decía el maestro Castilla del Pino “una vez descubierto lo falso se impone la impostura y la sobreactuación tratando de proyectar la mejor imagen posible a la ciudadanía”.
Sublime verlo y oírlo. Fabuloso ver lo que dice y la incongruencia corporal. Esto no se aprende se lleva dentro. Es el dueño del falsete. A su tendencia a la mentira compulsiva e impertérrita une ahora la quejorrea lacrimógena y moqueante, pidiéndole árnica y unión a la oposición.
Sánchez tiene un problema gordo, que no lo cura 10 años de diván psicoanalítico en Viena y es que no conoce la veracidad y carece de credibilidad. Se ha cargado su crédito y su acreditación. Ya no creemos sus falsos, mensajes de esperanza. Nos ha engañado demasiadas veces y los hechos y el tiempo son los jueces implacables.
Evalúan el rastro que Sánchez esta dejando y analicen su rostro. No fallaran en su diagnóstico.
En estos tiempos recios, hay que acompañarse por las metáforas clarificadoras y sabias del Dr. José María Ayerra, grupoanalista vasco muy prestigioso, que nos permitan alumbrar el comportamiento de los seudolíderes políticos,” los falsos líderes, incurren en impotencia interna, recubierta de repotencia externa y megalomanía con la que nos recrean de forma cotidiana, en la confianza de que un ambiente de confusión y miedo será suficiente garantía de credibilidad del engaño. Véase si no el esperpéntico espectáculo que nos ofrecen diariamente estos falsos lideres convertidos en pequeños rateros omnipotentes y mentirosos”.
Y para acabar, siento volver a repetirme pero la metáfora de Oozlum, nos viene como anillo al dedo.
Déjenme que me explique Oozlum era un fabuloso pájaro de leyenda que tenía la característica de volar hacia atrás, la cola hacia la frente y la cabeza en la popa. De este modo nunca sabia hacia donde iba, pero jamás perdía de vista de donde procedía. Hay que admirar la contraintuitividad de los “pájar@s” en cuestión. ¿Pero a donde nos llevan en su huida hacia delante?
En estos tiempos recios, más que nunca, estamos en derrota transitoria pero nunca en doma.
Buena semana santa.