El pasado viernes el Honorable Presidente del Parlament me invitó a mí, y a quinientas personas más, al juramento y toma de posesión de la Presidente de este pequeño país la señora Prohens. Fue un acto organizado con la formalidad requerida y con ilusión y emoción contenida a la que se dio rienda suelta una vez se sirvió un vino español en el incomparable patio de la Llotja.
Ayer la premier Prohens dio a conocer el Govern de Baleares para, en principio los próximos cuatro años. Tengo que decir que me ha sorprendido algún nombramiento pero parece que ha querido sentar en la mesa del poder a personas con experiencia y personas con experiencia en otros ámbitos profesionales que es la política y esto está muy bien.
Siempre he pensado que la política no debe ser una profesión sino una etapa profesional en la vida de una persona, la cual debe haber demostrado previamente su valía en otros ámbitos; creo que debe mirarse más hacia el sector privado, más hacia la Universidad y también dentro del alto funcionariado de la CAIB.
Resultará que la presidente es aristotélica pues ha conformado un Govern que bien podría ser el de los mejores, esta cuestión ya la traté en una crónica anterior. Creo que ha elegido un buen elenco de profesionales para dirigir el destino de este pequeño y querido país.
Si una cosa caracteriza a la premier es su espontánea sonrisa, que en el discurso convirtió en lágrimas al referirse a su familia, demostró que es una persona que siente y que se emociona cuando la ocasión lo merece.
Me gustó la música y la letra de su discurso, un discurso marcadamente liberal en el que garantizaba los derechos a todos los ciudadanos y además marco un equidistancia entre los perdedores Vox y Psoe, pues ambos perdieron y salían a ganar, podemos se ha suicidado y cada vez será más residual.
Después del acto, en el patio que une la Llotja y el Consulado del Mar, por cierto por primera vez tendremos una imprescindible Conselleria del mar, se desató la alegría e incluso la euforia. Habíamos conseguido superar con éxito ocho años grises de prohibiciones, ya se sabe que la izquierda no regula solo prohíbe.
Es costumbre que los nuevos gobiernos dispongan de cien días de gracia desde su constitución, veremos si la izquierda radical se los da o por el contrario intenta arrinconar a la minoría mayoritaria que sustenta al Govern.
Saben hay algo que no puedo entender es cómo encaja tan mal la derrota la izquierda, la cara de la huida Armengol en la Llotja era un poema. Si bien cumplió con la formalidad de felicitar a la nueva presidente, es un mínimo, después de ocho años dejó de ser la reina. Ahora, durante días su teléfono dejará de sonar y cada día que más que pase será más desconocido en esta su tierra pues la memoria colectiva es muy corta.
Armengol, salvo Cañellas y el inolvidable Soler, ha hecho lo mismo que sus predecesores, huir a Madrid donde no es más que una persona anónimo donde su papel en la oposición será irrelevante y que acatará la disciplina de partido antes que la defensa de nuestra tierra.
Espero con ilusión el papel que pretenderá jugar MES que ha quedado en la izquierda radical y que deberá dar muchos titulares para que sepamos que existe. Asimismo espero con especial interés las pretensiones de VOX que parece que no es consciente de la diferencia de votos con el PP y piden la luna. La política de Vox es simplemente tenernos como rehenes a los ciudadanos (vean sino en Murcia) para hacer chantaje al partido ganador y pedir los metros de moqueta que las urnas, los ciudadanos no les hemos dado.
Espero de la Presidente Prohens que no acepte un chantaje, de ningún tipo, y especialmente político de nadie, sería una gran decepción.
Las lágrimas, contenidas, obviamente fueron las de la señora Armengol cuando tomo conciencia de que los ciudadanos la hemos echado por su nefasta gestión que aún cree buena según dijo en el debate del domingo. Señora Armengol hace muchos años que no necesitamos salva patrias.
Marga Prohens, Presidente de Baleares, como dicen en Ciutadella, Sort i Ventura.