El próximo fin de semana celebramos, en Palma, el Día de las Fuerzas Armadas, por tal motivo quisiera hacer una reflexión, en voz alta, sobre lo que significa ese día, no solo para los militares, si no para la sociedad civil, a la que nos debemos, queremos y protegemos.
La Constitución Española es la Norma Suprema, de la sociedad española, que regula y garantiza nuestro modelo de convivencia democrática y que a la vez nos protege, especificando en su artículo 8 qué son las Fuerzas Armadas y cuál es su misión. Esa Norma que nos garantiza la convivencia democrática, que consolida un estado de derecho, que protege a los españoles, que promueve el progreso de la cultura y de la economía, dice qué son y para qué sirven.
Partiendo de esa base, tenemos que plantearnos qué grado de conocimiento se tiene de las personas que la componen y de las misiones que realizan, dentro y fuera de nuestras fronteras, y para ello nada mejor que hablar de lo que tenemos en Baleares, no hay que salir del archipiélago, los tenemos bien cerca, hombres y mujeres, por una parte oficiales y suboficiales, que han superado una oposición y llevan años formándose y demostrando que cuando intervienen, la realidad de su actuación supera las expectativas que se tenía de ellos, y por otro lado esa tropa que forma nuestras unidades y que sin llegar a los mil euros mensuales, destacan por su entusiasmo, compañerismo, disciplina y vocación de servir a los demás, recientemente no dudaron en hacer una maniobra de reanimación en el Paseo Marítimo de Palma, salvando la vida a una persona, o no dudaron en lanzarse al agua rescatando a una mujer en Cabrera.
Actualmente existe una coalición internacional contra el Estado Islámico en la que el Parlamento de la Nación considera que España tiene que participar, ahí tenemos a los militares del Regimiento de Infantería Palma 47, sí, los que están en el cuartel de Génova, Base General Asensio o Acuartelamiento Jaime II, como se le conoce ahora, un grupo de ellos acaba de llegar de Iraq después de haber estado seis meses instruyendo al ejército iraquí, y permitiendo con sus enseñanzas formar al personal que lucha para frenar el terrorismo del Estado Islámico y así poder mantener nuestro estado de bienestar y forma de vida.
Si se trata de realizar un esfuerzo de contención del yihadismo en África, ahí volvemos a tener a nuestros infantes, que durante casi un año y medio han estado en República Centroafricana, velando por nuestra seguridad, lejos de nuestras fronteras y por la de sus habitantes, como ocurrió con personal de diferentes ONG y funcionarios de la Unión Europea, que se encontraban en Bangui, la capital del país centroafricano y que se vieron atrapados en un fuego cruzado entre milicias rivales, cuando vieron aparecer los vehículos, con la bandera española y bien armados, respiraron aliviados, porque consiguieron ser evacuados hasta el aeropuerto, sin ninguna baja. Los que lo hicieron, tienen nombres y apellidos, familia, viven entre nosotros, los tienes en el colegio llevando a sus hijos, en la cola del cine, en el supermercado, viendo un partido de fútbol, los ves por la mañana corriendo con su camiseta roja por diferentes zonas o el paseo marítimo, algunos son mallorquines y posiblemente su modestia resta importancia a las vidas que salvaron.
Estos son dos ejemplos recientes de actuaciones pero podríamos citar muchas más, ya que las unidades de Baleares cumplieron en 2016, 20 años de su participación en misiones internacionales y eso da para mucho.
Pero también hay que hablar de esa parte menos conocida, pero que está ahí, en el día a día, ¿qué hacen estos militares cuando no están en misiones? Lo primero, instruirse y adiestrarse en el combate convencional y asimétrico al que se enfrenta hoy en día, porque no es nada fácil, saber responder a situaciones en la que te estás jugando la vida, eso lleva tiempo y mucho entrenamiento, y por otra parte estar en condiciones de aportar capacidades, a la sociedad, para cuando se nos necesite; algunos ejemplos, el verano pasado se puso en marcha el Plan Vigilante Balear para la protección del medio ambiente en la isla de Mallorca y Cabrera , patrullas itinerantes, en vehículo y a pie para detectar posibles focos de incendios, mantenimiento de espacios naturales e instalaciones. Otro ejemplo, en las últimas inundaciones de la isla, un retén de personal y material estuvo las 24h preparado por si se necesitaba su intervención; en 2016 recibimos más de un centenar de peticiones de apoyo por parte de ayuntamientos o instituciones para eventos de tipo cultural, deportivo o participación en diferentes ferias, como se puede apreciar abarcamos bastantes campos y el ritmo de trabajo es intenso.
Hasta ahora estamos hablando del Ejercito de Tierra, pero quien está en el Mediterráneo, luchando contra el tráfico de personas, inmigración ilegal y salvando vidas…...los tenemos bien cerca, en la Base Aérea de Son San Joan, junto al aeropuerto, son los militares del Ala 49 del Ejército del Aire que con sus aviones rastrean palmo a palmo el Mediterráneo para localizar las pateras y avisar a sus compañeros de la Armada Española, cuyos buques proceden al rescate, esos que alguna vez los tienes en la Estación Naval de Porto Pi, cuando les corresponde un merecido descanso.
Por eso me gustaría que cuando veas una persona con uniforme militar, no te extrañes, no te asustes, respétalo, admíralo y se consciente de lo que hace esa persona que lo lleva, siéntete seguro y orgulloso, aquí estamos para protegerte, que nuestra presencia, con armamento o sin él, sea un alivio y un seguro de vida. Resulta sorprendente y preocupante que personas jóvenes, que aún no han llegado a los 40, tengan un desconocimiento de lo que son sus Fuerzas Armadas, y aquí somos todos responsables, ¿se ha hecho lo suficiente para enseñar, educar, acercar y explicar qué son y para qué sirven?; otras personas, sin embargo, siguen ancladas en el pasado, no quieren ver y reconocer lo que tienen delante de sus ojos, les cuesta o se resisten a modificar sus estereotipos, parece que no les interesara; lo que no se conoce, no se respeta y si no se respeta difícilmente lo vas a apreciar.
“SOMOS LAS FUERZAS ARMADAS DE TODOS, TAMBIÉN DE LOS QUE NO NOS CONOCEN y también de los que no nos quieren. Y esa es en parte la finalidad de los actos que se van a desarrollar en Palma, con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, el próximo fin de semana, acercarnos a los ciudadanos con un acto público, el viernes, en el Castillo de San Carlos, y con una jornada de puertas abiertas en el Parque del Mar, el sábado; ven a conocernos, habla con nosotros, comprueba el material, vehículos y equipo con el que nos instruimos, te sorprenderá agradablemente, fórmate tu propia opinión, no te quedes con lo que te digan, jornadas que por otra parte queremos que sean continuas, en tanto que nuestros acuartelamientos están abiertos siempre para cualquier ciudadano que quiera visitarlos. Os esperamos.
Teniente Coronel de la Comandancia General de Baleares del Ejército de Tierra