![atropello col1ok](https://www.mallorcadiario.com/wp-content/uploads/sites/2/2013/04/atropello-col1ok.jpg)
Se está convirtiendo en algo relativamente común el hecho de que un conductor se de a la fuga tras causar un accidente, normalmente un atropello a un peatón o a un vehículo de dos ruedas (ciclistas, ciclomotoristas y motoristas). Rara es la semana en que no se da un accidente de este tipo de Baleares.
El último caso sucedió en la tarde del domingo 14 de abril, cuando un conductor atropelló a un ciclista de 16 años causándole graves lesiones, en las inmediaciones de la urbanización Puig de Ros y se marchó del lugar sin detenerse. Por la noche el presunto autor del atropello se entregó a la Guardia Civil, pero dadas las horas que habían transcurrido entre el atropello y la hora en que se le practicó la prueba de alcoholemia, dio negativo. Por ello fue puesto en libertad provisional con retirada del carné de conducir por orden del Juzgado de Instrucción nº 10 de Palma.
Días antes, el martes día 9 un vehículo atropelló a una anciana de 75 años en Andratx y se dio a la fuga. Aunque la mujer fue trasladada a Son Espases, falleció esa misma noche. Aún no se ha localizado al vehículo autor del atropello ni a su conductor, aunque la Guardia Civil continúa las pesquisas para su identificación.
Según fuentes de la Guardia Civil de Tráfico consultadas por mallorcadiario.com, aumentan los casos de vehículos que circulan sin seguro obligatorio o sin la ITV al día, como consecuencia de las dificultades económicas, lo que podría ser un factor coadyuvante pero no determinante. El motivo fundamental del aumento de los accidentes con fuga sería que en la mayoría de casos, siempre según las fuentes consultadas, los conductores si se hubieran quedado en el lugar habrían dado positivo en las pruebas de alcoholemia o drogas, motivo por el cual optan por abandonar el lugar y entregarse horas más tarde, cuando los efectos del alcohol y las drogas han desaparecido.
Habitualmente los conductores implicados en este tipo de casos alegan que no se dieron cuenta de haber atropellado a alguien, lo cual es muy difícil habida cuenta de los daños que presentan los vehículos, o que se asustaron y abandonaron el lugar pero que la víctima no quedó desamparada ya que había gente en las proximidades. El artículo 195 del Código Penal establece que para que se cometa el delito de omisión del deber de socorro la víctima debe estar “desamparada y en peligro manifiesto y grave”. Si no se dan estas circunstancias, el delito no concurre.
Muchos conductores que causan un accidente yendo bajo la influencia del alcohol o las drogas, prefieren arriesgarse a ser pillados con el delito de omisión del deber de socorro, del que hay posibilidades de librarse en un juicio, antes que esperar a la Policía Local o a la Guardia Civil y ser detenidos automáticamente. Las asociaciones de víctimas piden un endurecimiento de las penas para los conductores que se dan a la fuga y mejorar la redacción del Código Penal para evitar la impunidad de los delincuentes viales.
Según la memoria de la Fiscalía de Baleares del año 2012 en el año 2009 hubo 13 casos de omisión del deber de socorro, en 2010 hubo 10 y en 2011 hubo 12. Sin embargo, las conducciones bajo la influencia de bebidas alcohólicas o sustancias estupefacientes presentan un incremento notorio. En 2010 hubo 1.825 casos y en 2011 hubo 3.325 en Baleares.