La salida que realizó el yate Fortuna por las aguas mallorquinas ha sembrado la controversia. Bajo la argumentación de que el yate del Rey "tiene que salir a navegar de tanto en cuanto" la Casa del Rey ha justificado el recorrido marcado por la embarcación en torno a la isla de Mallorca.
Llenar el depósito del Fortuna cuesta 26.000 euros, casi 6.000 euros más que el salario medio anual de las Islas Baleares, motivo por el cual se ha recomendado al monarca no utilizar el yate en tiempos de crisis. No obstante, la tripulación ha consideró imprescindible que saliera para mantener en buen estado su maquinaria.
Sin embargo, la austeridad marcada en torno al Fortuna no supone que la Familia Real se quede sin navegar por aguas baleares: a bordo del Somni -embarcación de dimensiones más reducidas- salen a disfrutar del sol veraniego.