Cada día se buscan nuevos métodos para acabar con el vello corporal, más eficaces y sobretodo más duraderos. En esta ocasión, un hombre demuestra cual ha sido su invención: el soplete.
A fuego y con una cierta habilidad, el usuario va haciendo desaparecer el vello de sus piernas, aunque no se sabe si finalmente el remedio fue peor que la enfermedad, ya que visto el procedimiento se presume un cierto riego de padecer quemaduras importantes si no se lleva a cabo con mucha precisión.