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Ser curvi

Por Pilar Carbonell
domingo 13 de diciembre de 2020, 04:00h

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Las fiestas de Navidad, aunque este año son un tanto especiales, huelen a familia, a reencuentros, pero sobretodo a comida, mucha comida, a marisco los que pueden, a cordero los que quieren y normalmente a chocolate, a polvorones y al preciado turrón. Demasiado azúcar para poco movimiento.

Desde hace ya años cuando llegan estas fiestas tenemos asumidas dos cuestiones, que gastaremos más y que comeremos más. Los memes sobre los kilos ganados se viralizan en las redes.

En la moda hemos pasado de ver sobre la pasarela a modelos famélicas, literalmente anoréxicas a todo lo contrario, las llaman Curvis, aunque el término más ajustado sería Gordi, mencionar gordo es un insulto, se toma como un desprecio. Entonces ¿porque seguimos gordos? Estamos asumiendo que tener sobrepeso es normal, sin profundizar que no es un tema estético, cada uno es libre de hacer con su cuerpo aquello que crea oportuno, sino puramente salud y debería ser muy preocupante.

Casi el 40% de la población mundial tiene sobrepeso, son datos demoledores u escalofriantes si recordamos la cantidad de enfermedades que van ligadas a esos kilos que a uno le sobran. Parece que tenemos miedo a un cáncer, al corona virus pero no a las patologías derivadas del sobrepeso y la obesidad.

La población española ha envejecido pero también ha engordado con los años. Se habla mucho de la edad y poco de los kilos. Hemos ido aminorando la marcha al mismo ritmo que íbamos subiendo de peso. Nuestras vidas son cada vez más sedentarias.

No se trata de estar más o menos entradito en carnes, o que bikini te siente como a Naomi Campbell. Los que estamos delgados tenemos que escuchar una vez y otra eso de “lo tuyo es genético” o “tú no comes nada” afirmaciones que tu interlocutor por supuesto desconoce sobre ti pero le hacen sentir mejor a él con sus kilos de más. Le cuesta reconocer que come demasiado para lo que quema que al final es la ecuación que cuenta.

Estar tumbado sobre ese montón de cojines se ha convertido en una tarea más del día a día, una practica que gana adeptos a la vez que gana más y más kilos. Usted practique “sofin” ya que sólo pasará a ser “curvi”, de lo que le pueda ocurrir después ya se preocupará cuando el médico le recete un millón de pastillas. De los niños....de los niños hablaremos otro día que estás son SUS fiestas!!

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