“Solo se conoce esta cifra ya que todavía hay 18 ayuntamientos que no han cerrado los presupuestos del año 2017 o no han hecho entrega al Ministerio de Hacienda”, apuntan desde la FELIB.
Banyalbufar, Campos, Consell, Deià, Selva y Ariany tienen su deuda municipal a cero, mientras que hay consistorios con una deuda pública menor a los mil euros como son Muro, Alcúdia y Santa Margalida. Superando los 10 millones encontramos a Ibiza (13,9) y Palma (22,4).
Los ayuntamientos destinan un porcentaje medio de 8,41 por ciento del gasto de su presupuesto a pagar la deuda. Así los que dedican más partida económica a reducir la deuda son los consistorios de Ibiza (21,5 por ciento), Son Servera (19,9 por ciento) o Llucmajor (18,8 por ciento).
"Todos los datos pero son relativos si se consultan otros indicadores también disponibles",señalan. Cabe decir, por ejemplo, que Ibiza acumulaba en el banco un superávit de 16,9 millones de euros debido a la Ley de Estabilidad Presupuestaria de 2012 (más conocida como Ley Montoro) que mantiene bloqueados dinero del su- Peravia e impide invertirlos en infraestructuras y contrataciones de personas.
La FELIB ha puesto en marcha un Observatorio de Gobierno Local con el fin de poder manejar una gran base de datos genérica que permite la elaboración de estudios e informes y posteriormente comparar su evolución. Una herramienta que quiere resultar útil tanto para la prensa, ya que dará respuesta a muchas preguntas que hasta ahora no tenían; como a los mismos municipios que obtendrán una guía comparativa entre ellos y también de evolución propia; y a investigadores o profesionales del ámbito universitario que los requiera, ya que se quiere fomentar el estudio exhaustivo y serio de la realidad municipal de las islas, lo que todavía no se ha hecho.
"Tenemos un informe personalizado de cada municipio que se irá actualizando cada dos años", explica el presidente de la FELIB, Joan Carles Verd. "Tener esta información permitirá a los ayuntamientos priorizar los ámbitos de actuación o fijarse objetivos", añade.
La Fundación Carles Pi i Sunyer ha sido la encargada de llevar a cabo el estudio que recoge hasta 150 aspectos municipales. Esta herramienta surgió como una iniciativa de la FELIB a favor de la transparencia municipal y con el ánimo de ser un instrumento útil de consulta.