El Ayuntamiento de Sant Josep ha destinado el agua procedente del vaciado de la piscina municipal a la campaña antiincendios y, así, ha llenado varios depósitos que utilizan los bomberos en caso de fuego. Según han informado fuentes municipales, esta medida se ha tomado ante la grave situación de sequía que sufre el municipio.
Por motivos sanitarios, la piscina se vacía una vez al año, momento que se aprovecha también para limpiar a fondo las instalaciones. Esta operación suele hacerse en septiembre, que es cuando la piscina registra menos usuarios.
Debido a que el agua es clorada y no puede destinarse a determinados usos, el Consistorio ha optado por utilizarla para llenar los nuevos depósitos del Ibanat en Cala Tarida y Es Cubells. En concreto, se han extraído 120 metros cúbicos que han sido trasladados a los depósitos. En total, el camión cuba ha tenido que realizar ocho viajes.