Sa Costera, la pesadilla de la narcolancha de Cala Sa Nau

La Benemérita ha explicado este jueves el impresionante operativo desplegado para arrinconar y detener a los ocupantes de la última narcolancha detectada en la costa balear y que transportaba más de tonelada y media de polen de hachís además de decenas de garrafas de gasolina para regresar a su punto de origen: la costa norte de África.

Sin embargo, no contaban con Sa Costera, la embarcación de alta velocidad de la Guardia Civil. "Ellos intentaron alejarse y coger rumbo sur pero vieron que era imposible dejarnos atrás y tras una hora de persecución decidieron tirar hacia tierra", ha explicado el jefe del Servicio Marítimo en Baleares, Francisco Córdoba.

Nuestro objetivo era evitar que entrasen en zona de playa porque ya hay turistas y por tanto, bañistas, así que tuvimos que desembarcar a dos compañeros en la zona de rocas para que corriesen a por ellos". Y así lo hicieron con el primero de los detenidos.

Más tarde darían con el resto y arrestarían a otras dos personas encargadas de la logística.

HUIDA A 55 NUDOS, "A TODO GAS"

Los hechos ocurrieron el pasado día 4. El servicio se inició después de tener información de una embarcación alijando en tierra, concretamente en Cala Sa Nau.

La Guardia Civil montó una operación jaula por tierra, mar y aire y cuando los narcos se vieron sorprendidos, montaron en la semirrígida para huir. La pusieron a todo gas -50-55 nudos, lo que en términos de mar significa una velocidad máxima- y pensaron que escaparían. Pero no.

El Cuco por aire y Sa Costera por mar les marcaban de cerca y ellos cada vez disponían de menos combustible, así que finalmente acabaron optando por dirigirse de nuevo a tierra para intentar perderse por la isla.

Lo hicieron en Cala Gran (cala D'Or).