En concreto, se ha tenido que anular la conexión entre Ibiza y Marsella. Además, el 40 por ciento de los vuelos que salen desde Palma sufren un retraso de entre 30 minutos y cinco horas.
Sin embargo, las demoras en los vuelos, según explican desde el Twitter de los Controladores Aéreos, se deben a diversos factores. El más importante, lo acusan a la sobrecarga de tráfico aéreo programado para esta jornada y la falta de medios para gestionarlo; que lo valoran como el 37 por cien de las causas de los retrasos. En el mismo comunicado, también valoran que el 29 por cien de las demoras están ocasionadas por la huelga en Francia que reclama más controladores. Finalmente, el 18 por cien de estas incidencias estarían ocasionadas por causas meteorológicas.
Así, el sindicato de controladores aéreos, USCA, informa que este mes de mayo está teniendo mayor actividad que el año pasado. En concreto, calculan que los controladores han gestionado una operación cada dos minutos.
La delegada del sindicato USCA en Balears, Mara Riosalido, ha explicado que “este año la temporada ha comenzado antes que el ejercicio anterior” y que para junio se espera un aumento del siete por ciento en las operaciones aéreas con origen o destino Palma.
Para julio y agosto se crecerá, dice, entre un 2 y un 3 por ciento porque en verano el aeropuerto funciona a pleno rendimiento y "no hay mucho margen para crecer más". En la actualidad, el aeródromo puede soportar hasta un máximo de 68 operaciones a la hora y durante el mes de mayo ya se ha rozado esta cifra. Funcionar de esta manera, explica la responsable de USCA, provoca retrasos en cadena, ya que cualquier imprevisto provoca que el avión pierda el slot asignado por la torre de control, que es el turno que tiene la aeronave para despegar o aterrizar. Por eso, en USCA ya avisan que este verano pueden producirse muchos retrasos en el aeropuerto de Palma.
En junio se podrían alcanzar en días punta las mil operaciones diarias, un dato que por el momento sólo se ha venido registrando en agosto.
En cuanto a la plantilla de controladores aéreos, hace casi una década que no ha habido un incremento de plantilla. Durante este verano habrá 14 nuevas incorporaciones en la torre de control pero no acabarán su formación hasta el mes de septiembre, de manera que hasta entonces seguirá habiendo un total de 50 profesionales para controlar los despegues y aterrizajes en Son Sant Joan.