La votación no pudo estar más ajustada, 313 diputados dieron el sí mientras que 312 se mostraron en contra de obligar al gobierno de May a solicitar más tiempo a Bruselas para conseguir un Brexit pactado.
La pelota está ahora en la Cámara de los Lores, que deberá validar el acuerdo. Después será el turno de la Unión Europea, que decidirá si se concede el aplazamiento necesario para ordenar la salida de Reino Unido.