Los tres detenidos por orden del juez Penalva en relación con la trama de corrupción de la Policía Local de Palma han pasado su primera noche en los calabozos de la Policía Nacional. Todo apunta a que la Policía Judicial agotará el plazo legal de 72 horas antes de ponerlos a disposición judicial. Es el tiempo que tendrán para examinar la abundante documentación requisada en los diversos registros llevados a cabo a lo largo de este martes en oficinas y establecimientos del grupo de ocio propiedad de Bartolomé Cursac.
La Policía Nacional detuvo este martes al empresario Bartomeu Cursach, así como el director general del holding de empresas, Tolo Sbert, y a Toni Bergas, amigo del empresario, exinspector de la Policía Local de Palma y antiguo jefe de seguridad de Cursach Ocio.
Los agentes, dirigidos por el juez Manuel Penalva y el fiscal Subirán, registraron este martes las instalaciones del establecimiento de ocio Megapark, en Platja de Palma. La policía también se ha incautado de documentación tras registrar las discotecas Tito's y Pacha, ambas ubicadas en el Passeig Marítim de Palma. La acción policial se amplió con el registro de otros locales del empresario del ocio así como su domicilio particular. Este mismo miércoles, los agentes dirigidos por Penalva y Subirán han registrado las oficinas de la discoteca del grupo en Magaluf, BCM, aumentando la documentación requisada.
La operación se enmarca dentro de las investigaciones judiciales realizadas en torno a la supuesta trama de corrupción policial y empresarial en Platja de Palma. La detención de Cursach, un empresario con larga trayectoria en el sector del ocio en Mallorca, formaría parte de una ramificación del caso, que aún se encuentra bajo secreto d sumario y sobre el que no se descartan nuevas detenciones.