Real Club de Fútbol Ciudadanos

Ciudadanos es un partido político de ámbito nacional que no se presenta a las elecciones en un montón de lugares del territorio nacional. Sin embargo, atesora un mérito enorme: carece de militantes; esa masa social más o menos numerosa ante la que habitualmente los dirigentes deben rendir cuentas a cambio de que les consigan más o menos votantes.

La formación naranja se ha librado de ese lastre. Los pocos que tenía abandonan el barco para no verse involucrados ni de lejos con un proyecto político que cuenta con el expresident José Ramón Bauzá. ¿Quién podría reprochárselo? Se trata de una moto averiada aunque fuera de Balears no lo saben. Y no solo eso, sino que consideran al eurodiputado que llama comunista al papa Francisco, un valor político. Pura ignorancia. Más dura será la caída.

Ciudadanos se está transformando en un club de fútbol. De ahí que anuncie nuevos fichajes como si fuera el Real Mallorca. Con igual suerte. Cree que incorporaciones estelares como la ex diputada de Vox, Malena Contestí, detendrá la hemorragia. Lo hará pero no por ese fichaje, sino porque ya no hay militancia que perder.

Hubo un tiempo no muy lejano en el que Ciudadanos trataba a los ciudadanos, potenciales votantes, como personas adultas. Esa época tocó a su fin con la marcha de Xavier Pericay por la puerta de atrás, porque un club que ficha compulsivamente, acaba echando a pilares de la plantilla de igual forma. Es lo que pasa cuando se abandona la política para abrazar el márketing. Y cuando se trata a los votantes como a hinchas ultras. Inés Arrimadas y Patricia Guasp se equivocan de deporte. Aunque en estos tiempos de estadios vacíos igual Contestí logrará más votos que Bauzá. No será difícil.