¿Cómo recuerda su época laboral como modelo?
La recuerdo como una experiencia más de mi vida, de la que guardo buenos recuerdos. Es algo que podía compaginar bien con mis estudios.
Supongo que ahora querrá ser un «modelo»... de gestión pública.
Me encantaría que así fuese. La verdad es que sería un honor para mí que cuando me vaya, Llucmajor sea un poco mejor de lo que es ahora. Esa sería mi mayor recompensa.
¿Por qué decidió entrar en política?
Decidí entrar en política porque tenía muchas inquietudes y ganas de cambiar las cosas. Creo que estar dentro de la actividad política es la manera de conseguir ese objetivo.
¿Cuáles cree que son los principales retos de su mandato como nuevo alcalde?
El primer y principal reto es conseguir que todo el personal de la casa, tanto funcionarios como personal laboral, se sienta a gusto con tu trabajo. Es preciso ser escuchados y apoyados por parte de los políticos. Si el personal de la casa trabaja a gusto, todo lo demás irá rodado.
Como sabe, hay ya en Llucmajor una ordenanza cívica, pensada sobre todo para S'Arenal...
Debemos mantener lo que funciona de la ordenanza cívica y cambiar o modificar lo que no. Para ello es necesario recoger propuestas y sugerencias de los vecinos y sobre todo ir de la mano de la Policía, que es quien debe hacer que se ejecute.
¿Debemos apostar por un turismo de cinco estrellas o sería ya suficiente con mejorar el actual?
Queremos un turismo mejor y apostaremos por ello. En nuestro programa llevamos una apuesta por el dualismo turismo-deportes, que poco a poco queremos que coja fuerza. Pero no sólo depende de nosotros. La mejora del turismo pasa por todas las administraciones.
¿Se llevará bien con sus socios de gobierno?
Estoy seguro de que sí. Nos hemos entendido muy bien en todo momento y por encima de las siglas están las personas.
¿Hasta dónde le gustaría llegar en política?
Hay que vivir el presente. Tenemos muchos retos por delante y un programa que cumplir. Haremos todo lo que podamos en la medida de lo posible. Creo que nos espera una etapa muy bonita a nivel local.
¿Qué cree que hace falta hoy para mejorar la marca PP en toda España?
Aprender de los errores, escuchar a la gente desde la humildad y trabajar mucho con ilusión. Hay que saber de los problemas de la gente y hacer lo posible por solucionarlos. Para eso, se necesita mucha calle.