El expresidente de la Generalitat llegó el viernes por la tarde a la capital alemana, donde se encunentran también una delegación de diputados catalenes de ERC y JxCat. Pese a haber sido puesto en libertad, el expresident y líder de JxCat, tiene que presentarse una vez por semana a la policía de Neumünster, han informado diversos medios. A las 12 del medio día de este sábado, Puigdemont ha comparecido ante los medios.
Carles Puigdemont ha empezado su declaración recordando "el sufrimiento" del resto de presos catalanes y que sus familiares tienen que recorrer 600 kilómetros para visitarlos. "Nuestras instituciones viven desde hace meses una situación de intervención inaceptable. Los representantes lo somos porque los ciudadanos de Catalunya nos eligieron. Catalunya tendría que tener ya gobierno", ha añadido.
Así, Puigdemont ha indicado que la decisión del Comite de Derechos Humanos de Naciones Unidas brinda la oportunidad al estado español de "cambiar de estrategia". Ha manifdestado que España debería hacer "el primer paso", para que un conflicto que es "político" tenga una "solución política".
El expresidente catalán ha dicho que se encuetra en "el exilio" y que tendrá que fijar su residencia en Alemania. Sin embargo, asegura que su intención es trasladarse a Bruselas, donde se encuentra el gobierno legítimo que le permite actuar desde "este exilio".
Puigdemont ha respondido a las preguntas de los periodistas. Sobre la cuestión de las actuaciones de los diferentes gobiernos europeos ha manifestado que "respeto las actitudes políticas de cada gobierno, sea alemán, suizo o belga. Estoy convencido que estos gobiernos han actuado en el marco de la democracia. Yo no querría interferir en la vida política alemana".
A la pregunta de qué plantes tiene ahora ha respondido que "me quedaré a Berlín. No sé exactamente qué haré estos próximos días. Quiero seguir en la defensa de nuestros derechos y mis derechos personales".
Los periodistas también han querido saber sobre la estancia de Puigdemont en la cárcel. "Han sido días intensos. Mis hijas y mujer me esperaban en Béligca. En prisión he encontrado un trato profesional bueno. Ha sido una experiencia que refuerza mis convicciones. Vuelvo a exigir una vez más la liberación de los compañeros que se encuentran en prisión, porque esta causa necesita más reglamentos y menos prisión. Menos fiscales y más política", ha respondido Puigdemont.
También le han preguntado sobre la situación de desacuerdo e incertidumbre en el Parlamento catalán: "Confío en que esta vez la investidura de Jordi Sánchez tire adelante, porque tenemos los votos, el derecho y la legitimidad internacional". Añadía también que "mis derechos como diputado están intactos y estoy defendiendo los derechos de los ciudadanos que me han votado".
Por el momento, sobre Puigdemont todavía pesa una acusación por malversación. Una vez examinada por el tribunal regional alemán, la euroorden podría ejecutarse y el expresident sería extraditado a España, aunque tan sólo podría ser juzgado por malversación. Tan solo podría ser juzgado, por lo tanto, por la acusación que justificase la aplicación de la euroodrden.
La ministra de justicia alemana Katarina Barley señaló este viernes en rueda de prensa que España deberá demostrar el delito de malversación y “no será fácil”. En caso de desestimarse la euroorden, “entonces Puigdemont sería un hombre libre en un país libre, es decir, en Alemania”, afirmó la ministra.