Por ello, además de aumentar la labor formativa e informativa respecto a los peligros de la socialización a través de las redes sociales, el colegio ha aconsejado tanto a los progenitores como al colectivo docente a prestar atención a señales que puedan mostrar indicios, como cortes en antebrazos, un aumento del tiempo y frecuencia de conexiones a Internet para acceder a juegos en red o la curiosidad repentina por temas relacionados con la muerte.
Igualmente, al margen de este juego, el Copib ha manifestado que entre las causas que pueden empujar a los jóvenes al suicidio se encuentran dificultades de relación y comunicación en familia, problemas de imagen, baja autoestima, acoso escolar, maltrato o violencia, entre otros.
"La autolesión es una forma de expresión para el adolescente, que a menudo no entiende ni sabe qué hacer con su malestar emocional; por ello es tan importante la educación afectiva permitiendo espacios para exteriorizar lo que sienten", han señalado. "La detección de estos casos es fundamental para ofrecerles la ayuda psicológica que precisen", han añadid