Pocas hospitalizaciones, la buena noticia de la Covid en Baleares

El incremento de contagios por Covid en Baleares no va acompañado con un aumento de las hospitalizaciones; más bien, al contrario. La tensión del sistema sanitario se está dejando notar en la atención primaria, donde se realizan las pruebas y se atienden a los enfermos con síntomas leves; pero no se percibe en el incremento de casos graves que requieran un ingreso en hospital.

De hecho, el número de enfermos de Covid ingresados en planta se ha ido reduciendo durante los últimos días a un ritmo constante, de igual manera a lo que ocurre con los afectados que requieren permanecer en UCIs. De los primeros, siguen ingresados este fin de semana 53 enfermos mientras que los segundos tan sólo son 14. Estamos hablando, pues, de algo más de sesenta enfermos en todo Baleares que requieren atención hospitalaria. En esta misma línea, la cifra de muertos permanece estancada desde hace semanas.

Estos datos son clave para interpretar la realidad de la pandemia en las Islas, donde a pesar del aumento puntual en la cifra de contagios confirmados, la enfermedad no presenta la gravedad que representaba hace unos meses, cuando el número de ingresos hospitalarios llegó a comprometer la eficacia del sistema.

La vacunación ha demostrado ser clave en este cambio de paradigma. Se evidenció desde el comienzo con la administración de la vacuna en las residencias, donde estaba la población más vulnerable y donde los contagios, pasados los meses, se han reducido a cero. Por la misma causa, las infecciones, ahora, se concentran en la población menor de 30 años que es, precisamente, la franja de edad a la que ha llegado más tarde la vacuna.

Todos estos datos apuntan a que la Covid sigue una evolución sanitaria cuyos efectos en Baleares comienzan a ser menos graves, independientemente del aumento puntual de contagios, cuyo freno debe llegar principalmente a través del correcto comportamiento social y el cumplimiento de las normas dadas. A la espera de una resolución definitiva, la esperanza hoy reside en la baja intensidad que la enfermedad proyecta sobre el sistema hospitalario y en la efectividad de la vacunación, que aún está pendiente de alcanzar a los grupos que no han cubierto la pauta y que a día de hoy son aún el 55 por ciento de la población diana.

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