Pedro Sánchez, la esperanza del PSOE

Cada vez se multiplican más los apoyos a Pedro Sánchez para ser elegido dentro de unos días nuevo secretario general del PSOE. Este economista madrileño de 42 años con la mitad de su vida militando en el partido socialista representa ahora el espíritu de renovación de una formación que estaba pidiendo a gritos el recambio de su cúpula.

Los apoyos a Sánchez son sorprendentes, desde la práctica totalidad de la federación andaluza hasta el propio aparato de Ferraz. En Balears en principio las simpatías eran para Eduardo Madina, pero finalmente Sánchez también ha ido imponiéndose.

Incluso siendo madrileño ha sabido leer a la perfección las inquietudes de la periferia española. Promete un federalismo asimétrico que puede suponer una última solución de compromiso para la soberanista Catalunya, pero que también es muy bien visto en Balears.

Formalmente el discurso del vasco Madina es más de izquierdas que el de Sánchez, pero en realidad el del del madrileño es económicamente más equilibrado y aspira a mantener un electorado de centro izquierda que podría ir a la abstención si el PSOE se escorase demasiado a la izquierda en un intento de atajar la fiebre Podemos.

Sánchez, si gana las primarias, ofrece un rumbo más centrado y firme. Sabe que una alternativa real de cambio pasa por dejar a un lado las modas y en centrarse en una oferta sólida y mesurada. Parece no importarle en demasía el fenómeno mediático Pablo Iglesias. Sabe que esta formación acabará chocando con la dura realidad cuando tenga que hacer frente a un proceso electoral local y autonómico, mientras que el PSOE cuenta con una experiencia de décadas para poder ofrecer las respuestas que piden los ciudadanos a sus reivindicaciones más próximas y concretas.

A su vez, es consciente de que el gran beneficiario a corto plazo de la eclosión de Podemos es el PP. La formación de Iglesias debilita el PSOE. Y si este partido, para evitarla, escora a la izquierda, le regalaría el centro a los populares.

La imagen renovada de Sánchez puede ser el de la recuperación socialista en las próximas generales. Es muy probable que el PP llegue fuerte a esta cita si queda determinada la superación de la crisis. Pero al menos Sánchez puede aspirar a recortar distancias.

Todo depende de si consigue la victoria interna. Pero al menos los socialistas están demostrando su capacidad para generar líderes jóvenes y renovadores.