Las obras ilegales en Son Banya han puesto en alerta al Ayuntamiento de Palma, que admite las dificultades para detectar y frenar este tipo de actuaciones. Muchas de estas construcciones se llevan a cabo de madrugada, lo que complica la identificación de los responsables. A pesar de ello, el consistorio insiste en su compromiso por restituir la legalidad urbanística en la zona.
El Ayuntamiento de Palma ha asegurado que está haciendo "lo posible" para identificar a los responsables de las obras irregulares realizadas recientemente en el poblado de Son Banya. Así lo ha manifestado el teniente de alcalde y regidor de Urbanismo, Óscar Fidalgo, en una rueda de prensa en la que ha destacado que se trabaja "constantemente" para restituir la legalidad urbanística en la ciudad.
Fidalgo ha señalado que, en el caso de Son Banya, hay intervenciones que "transcienden las competencias" del área de Urbanismo e incluso del propio Ayuntamiento. Ha insistido en que la administración municipal persigue todas las infracciones urbanísticas, aunque no siempre sean visibles públicamente.
El regidor ha subrayado que cada semana personal de Infraestructuras, Servicios Sociales y Urbanismo trabaja en la zona, llevando a cabo tareas como la eliminación de casetas, retirada de escombros y el uso de maquinaria pesada para mejorar el entorno.
Sin embargo, ha reconocido que el Ayuntamiento enfrenta dificultades a la hora de detectar las construcciones ilegales, ya que muchas de estas actuaciones se realizan de madrugada, lo que dificulta su denuncia hasta que las edificaciones ya están avanzadas. Además, ha apuntado que la problemática social del barrio y el "código de conducta" de sus habitantes complican aún más la identificación de los responsables.
El consistorio mantiene su compromiso con la legalidad urbanística en Son Banya y el resto de Palma, aunque admite que en algunos casos las soluciones exceden sus competencias y requieren la colaboración de otras instituciones.